

He pasado unos días estupendos en Holanda, inolvidables, junto a mi hermana que está allí con una beca Eramus. Hemos visitado muchos sitios, ciudades, mercados, cafetería, tiendas, restaurantes... y lo hemos pasado muy bien. Cómo no, tenía que traerme algún producto gastronómico como testigo el viaje y he aquí uno de de los platos que he preparado esta semana con unos pimientos muy pequeños que encontramos en un mercado de Rotterdam. Algunos eran rojos y otros de un color naranja intenso, y los dos eran muy sabrosos. Los preparé enteros, en el horno, para que no perdieran su forma original, que es lo que realmente llama la atención. Son pimientos minis, pero lo cierto es que muy carnosos.
Un solomillo de cerdo, cocinado con pimienta y vino blanco, fue el acompañamiento perfecto para estos pimientos holandeses.


En otro capítulos os mostraré los pancakes que espero preparar pronto con una harina especial que compré y un sirope.
El plato de hoy va por mi sister, muxux guapa!!!
Ingredientes
Pimientos holandeses minis, rojos y naranjas
Un solomillo de cerdo mediano
Pimienta
Sal
Aceite
Vino blanco
Preparación
Encendemos el horno a 180º
Salpimentamos el solomillo, añadimos el aceite, el vino blanco, y lo ponemos en la bandeja del horno.
Incorporamos los pimientos, con la sal y el aceite.
En media hora sacaremos la bandeja del horno, para que la carne no se quede demasiado dura.
Bon Appétit!!!